martes, 24 de enero de 2017

Sobre la marcha...

Sé que hace mucho tiempo que no publico por unas cosas u otras, y que debería estar publicando, pero he estado liada, de viaje, y ahora que he vuelto a la rutina quiero volver a involucrarme en este blog, porque sé que puede ayudar a muchas personas.

Esto está escrito sobre la marcha, y voy a hablar sobre mi experiencia desde el momento que empezaron a haber pequeños cambios en mí camino a una recuperación.

Era 9 de abril de 2014, yo iba con miedo, realmente no quería ir, porque yo aún no admitía que necesitaba ayuda -error por mi parte-, pero me recibió aquella tarde del miércoles 9 de abril la nueva psiquiatra, en este caso la sustituta, pero dejaba atrás varios intentos fallidos de recuperación y comenzaba en otro lugar, con miedo pero no me arrepiento. Me recibió, me dio de nuevo el diagnóstico que me habían dado anteriormente, me cambió la medicación, y aquel día comenzó mi andadura en ese centro -gracias a su ayuda yo estoy escribiendo esto-. Me dieron cita con la nueva psicóloga para el día 16 de abril de 2014, era jueves, y recuerdo perfectamente como era terapia familiar, esa terapia fue demasiado larga, duró casi dos horas. Sinceramente, yo no quería estar ahí, no, no quería, pero comenzó ya mi trayectoria, cada semana tenía cita con la psicóloga, una vez al mes terapia familiar, una vez cada X tiempo psiquiatra y nutricionista. Conforme iba mejorando se fueron alargando más las citas.
Hace casi tres años que empecé en Afectamur, pero a día de hoy me acuerdo de cuando mi psicóloga me decía que la primera vez que fui estaba muy apagada -no lo recuerdo pero no lo desmiento, no quería estar ahí-, y que cada semana me vio más optimista, que yo dejaba ahí energía positiva y me iba con más energía. Cuando empecé a recuperarme recuerdo un día que una chica que estaba comenzando allí, no quería estar, me puse a hablar con ella, le ofrecí mi número para ayudarle con lo que necesitase, con esto quiero decir que afirmo lo que decía mi psicóloga. Mi psicóloga decía que desprendía alegría, que tenía ganas de recuperarme y ponía de mi parte, recuerdo cada uno de los deberes que me mandó estando en terapia.
He de reconocer que yo hacía una comida al día o ninguna, y firmé el 7 de julio de 2014 un compromiso con mi psicóloga, hacer 5 comidas al día, le dije que no lo iba a conseguir de golpe, pero lo intenté poco a poco, y en noviembre de 2014 lo conseguí, no sólo gracias a su ayuda y mi esfuerzo, sino a otra chica que estaba mucho más recuperada que yo e iba a esa asociación y quedábamos cada dos fines de semana, digamos que volvió a enseñarme a comer.
Poco a poco fui recuperándome, ¿y cómo? Con mucho esfuerzo, con ganas de luchar, cuando me caía me levantaba, haciendo los deberes que me mandaba mi psicóloga, tomando la medicación, con muchos post-it, con textos, con desahogos, con miles de cosas, que a día de hoy conservo, por ejemplo, algunos ejercicios que me mandaba los sigo teniendo en la pared, otros guardados y uno de ellos en mi escritorio, muchos post-it siguen puestos, otros en libretas que usaba en 2014-2015-principios de 2016.
De aquí no se sale de la noche a la mañana ni por arte de magia, hay que poner mucho de sí mismo, y ante todo querer curarse. Yo entré bastante mal y respondí al tratamiento. No hay un tiempo exacto para recuperarse, unos tardan más y otros tardan menos.
Sigo yendo a Afectamur, pero desde julio no tengo cita con la psiquiatra, el 1 de febrero tengo que volver a la psiquiatra, con la psicóloga no he vuelto a ir desde el 27 de junio de 2016, me dio vacaciones y no ha vuelto a darme cita. Y con la nutricionista no voy desde septiembre. De ir cada muy poco tiempo a ir cada meses y meses.
Realmente, y voy a ser sincera, yo no me veía capaz de salir de ahí, no, no me veía capaz, estaba en el fondo del pozo, no, lo siguiente, había hecho un agujero en el fondo y me había ido más abajo.
Desde que entré en este centro me dí cuenta que quería estudiar Psicología y especializarme en Psicología Clínica, ¿por qué? Quiero ayudar con otras personas que pasan, han pasado o podrían pasar por lo que yo pasé.
La primera vez que me llevaron a ver si ponían solución a esto es cuando mi hermana alertó a mis padres, y aunque en ese momento me cabreé muchísimo, a día de hoy se lo agradezco como nadie.

A día de hoy quiero luchar por mis sueños, ser psicóloga, vivir en Madrid, publicar un libro contando mi experiencia para ayudar a otras personas, en otros muchos sueños que tengo en mi vida.

Si yo he podido, y puedo, ¿por qué no vas a poder tú? Claro que no es fácil, claro que no, y claro que no se consigue de un día para otro, pero con esfuerzo y constancia sí. Si pasas por esto, depresión, cualquier problema relacionado o sabes de alguien que pasa por esto, pide ayuda o hazle ver que debe pedir ayuda, con ayuda profesional de todo se sale.
Yo en lo que pueda puedo ayudaros, pero al fin y al cabo yo no soy médico para diagnosticar nada a nadie, pero sí puedo ayudar desde mi experiencia, que por suerte o desgracia, no es pequeña.

Lo he escrito sobre la marcha, como he dicho al principio de la entrada, pero aunque haya sido sobre la marcha, si lo he escrito es por algo, es decir, mi interior necesitaba sacarlo para vosotros.

Y de verdad, espero publicar mucho más frecuente.

Y con esta entrada, me despido hasta la próxima, espero que hayáis tenido un buen inicio de año, ¿y qué deciros? Que no os rindáis, luchar y ser fuertes. De todo se sale. Esfuerzo y constancia.
Stay Strong.

¡Hasta la próxima!
¡Un abrazo!

Vas a ganar la batalla, vais a ganar la batalla, vamos a ganar la batalla.

¡Hola! Hoy quiero hablar un poco de mi 2019 para transmitir que no debemos perder la esperanza, que se puede, que hay salida, y para pedi...